Por Walter C. Medina
ENTREVISTA A CONCHI ABELLÁN.
El acoso escolar y el suicidio como causa primera de muerte en los adolescentes, fueron algunos de los temas en los que ahondó la Conchi Abellán, activista social, política y militante de Podemos. “Necesitamos una buena organización y predisposición para trabajar con todos los colectivos sociales y con toda la gente luchadora organizada para realmente ser esa herramienta útil de transformación”, sostuvo la representante de Podem Catalunya durante una entrevista concedida a Noelia Morinigo y Ximena Donamaría en el programa de Radio “Cenizas de Babilonia. Diáspora Española”, que emite Radio del Pueblo, AM 830.
¿Qué cambios crees que se pueden hacer respecto al período anterior con el fin de mejorar la fluidez y la comunicación entre los miembros de la coordinación y los círculos?
Se pueden hacer muchos. En principio, la etapa anterior fue más para establecernos como dirección, establñecernos en Catalunya, y estructurarnos, porque veníamos de una desestructuración bastante amplia y de tener muchos coordinadores, muchos secretarios generales, y también gestores y equipos técnicos.
Y tres años y medio dan para establecerte como organización, como Podem en Catalunya. Ahora lo que toca es reafirmar mucho más los círculos, cuidar más a la militancia y sería una organización mucho más estable que ponga en el cetro la política de lo público y por eso no vamos a centrar en las tareas de estructuración interna como partido para que haya una comunicación real y mucho más efectiva con los círculos.
Por eso proponemos una sede comarcal, que es un enlace nuevo que no había tenido hasta ahora, y esto nos va a ayudar a tener mucha más interacción y comunicación directa, porque hasta ahora costaba llegar a todos lados, porque Catalunya es muy grande. También ir viendo cómo trasladamos hacia afuera esa necesidad de que Podem tenga más presencia en la política y no que sea una fuerza subalterna como nos han puesto hasta ahora. Hemos venido a hacer política, queremos hacerla y vamos a ir con todo para poder hacerla.
¿Qué significa que la gente haya vuelto a poner su confianza para que estés al frente de este proyecto?
Significa mucho. Para mí Podem y Podemos fue un cambio en cómo tenía que entender cómo tenía que ser la política, porque vengo de movimientos sociales, no vengo de haber estado nunca en ningún partido y tenía la ilusión de hacer política de otra forma.
Salir escogida otra vez después de tres años y medio, que ya de por sí soy la primera coordinadora autonómica que más tiempo ha estado en Catalunya, pues es todo un honor. Después de empujar este proyecto, hay posibilidades de hacer mucho todavía y la verdad es que es uva alegría, un honor y una gran responsabilidad.
Y por otro lado, en plan humano, acojonada; porque ahora toca el otro reto que es el de cuatro años más de mucha intensidad, porque precisamente Podem en Catalunya tiene que ser el centro, y por tanto asustada, en el buen sentido; pero con muchísimas ganas de afrontar esto que no solo es necesario como fuerza política en Catalunya, que tenga un Podem fuerte, porque Podem en Catalunya es la única fuerza política que defiende a la clase trabajadora y los servicios públicos.
Necesitamos una buena organización y predisposición para trabajar con todos los colectivos sociales y con toda la gente luchadora organizada para realmente ser esa herramienta útil de transformación. Durante el último tiempo has hecho un gran trabajo para visibilizar el acoso (bullyng) en las instituciones educativas.
¿Qué falencias crees que hay al respecto y cómo se pueden mejorar?
Aunque siempre hemos tenido bullyng, es un tema que se está viendo cada vez más en las escuelas. Y las instituciones no están haciendo absolutamente nada, todo lo contrario, lo que suelen hacer es ocultarlo para que no digan que el colegio está mal.
El tema de la salud mental es otro tema. En el tema del bullyng tengo dos experiencias. Cuando yo era muy jovencita mi hermana sufría bullyng; ella ni siquiera podía hacer clases porque tenía que ir directamente al despacho del director a hacer las clases porque incluso le pegaban delante del profesorado; salía al patio e iban al patio a pegarle.
Y yo salía a defenderla. Era mi hermana, y por tanto yo me dejaba la piel por ella. Había como un silencio, y ese silencio de todo el resto me marcó un antes y un después; pero si a todo esto le sumas que mi hijo tiene autismo, y cuando empieza a hacerse mayor también empieza a sufrir bullyng. Y no es solo que lo sufra sino que el propio colegio no hace nada. Lo he tenido que cambiar de colegio tres veces.
A partir de ahí, cuando vi que los colegios no tenían los mecanismos, o si los tenían no los estaban utilizando, pues empiezo a ponerme un poco más en activo con las asociaciones y entidades contra el bullyng, incluso gente que tiene hijos que se han suicidado por esto. Yo ya no solo lo llevo a lo personal, sino que lo llevo a lo político, porque al final lo político es personal. No puede ser que todavía haya chavales y chavalas que tengan que estar pasando por esta situación, por este drama, por no ser iguales, por no estar en el canon de la norma que hoy en día está más marcado por las redes sociales.
En este tema voy a seguir metida hasta el final porque creo que es importante darle voz a todo lo que están viviendo porque hay un aumento de la normalización de los ataques. Cuando un chaval o una chavala ya no quieren salir de se casa, eso es preocupante. Si los colegios, para no quedar marcados como malos colegios, no tramitan un expediente, entonces ya tenemos un problema grave. El silencio lo que hace es reafirmar todavía más a la persona que abusa y empequeñeciendo más a la persona que es agredida.
¿Desde Podem Catalunya y el Consejo de Coordinación harán fuerza para poner el tema de la salud mental en agenda?
Claro, es que además el suicidio juvenil es la mayor causa de muerte en la adolescencia, es la primera causa de muerte en la juventud, Hay un problema importante en el que hay que trabajar. Yo con diecisiete años intente suicidarme. No es algo que yo diga mucho por eso mismo del tabú. Estuve en un psiquiátrico ingresada por intento de suicidio. Es un horror estar en un psiquiátrico y también es un horror el después, porque no hay un acompañamiento real.
No era tan común en Barcelona en aquellos momentos, pero sí en los barrios humildes. En esos barrios la tasa de suicidios era muy alta, precisamente porque no veías cómo salir de allí, salir del ciclo de la pobreza. Además la propia sociedad no te ayuda a salir.
Eso mismo es lo que le estamos trasmitiendo a nuestros jóvenes, y a mí eso me preocupa, que la gente joven se plantee que va a vivir para cobrar 900 Euros de mierda que no da ni para pagar el alquiler. Tenemos que darle una vuelta a esa situación, porque nuestra gente joven es el futuro de este país, es el que lo va a levantar.