“Las leyes de Memoria han tenido buenas intenciones pero han sido claramente burladas por la derecha española”

Por Walter C. Medina

ENTREVISTA A EMILI CORTAVITARTE

Desde París, Miguel Ángel Ferris entrevistó a Emili Cortavitarte, Licenciado en Historia Moderna y Contemporánea por la Universidad de Barcelona, Profesor de Historia de nivel secundario y ex Secretario General de la CGT de Catalunya. Actualmente presidiendo la Fundación Salvador Seguí, Cortavitarte se refirió, entre otros temas de actualidad, a la importancia de la memoria para esclarecer lo ocurrido en España durante los años de la dictadura franquista.

“Todos aquellos que cometieron crímenes de lesa humanidad han ido muriendo tranquilamente en sus camas y en sus casas, cosa que por suerte en otros países no ha sido así, y los responsables han sido juzgados”, sostuvo durante la entrevista concedida a “Cenizas de Babilonia. Diáspora Española” (AM830 Radio del Pueblo).

La película “Marco”, dirigida por Víctor Arregi y Jon Garaño, cuenta la trayectoria fingida de un personaje que se hizo pasar por sobreviviente del Holocausto y que consiguió interesar a amplios sectores de la sociedad y de los medios de comunicación con su frenética actividad memorialista, ¿qué sentimientos y reflexiones te sugiere este caso concreto?

Bueno, yo conocí a Enric Marco. Estuve en tres etapas con él; por un lado en el Comité Nacional de la CNT, luego siendo yo profesor y delegado sindical y él como presidente de la Asociación de Madres y Padres de alumnos, y en la última etapa en la que mis alumnos hicieron trabajos a partir de su lugar.

Yo me lo he pasado peor leyendo el libro que viendo la película. De todas maneras es un regusto amargo, porque pienso que es una persona con una muy larga trayectoria de activismo sindical y social; y reducir eso de alguna manera a esos últimos momentos y a esa situación un poco de chasco del descubrimiento de que él no ha estado en un campo de concentración a pesar de que como se ve en la película lo explica mejor que nadie; pues tiene un sabor agridulce.

De todas maneras considero que los directores se han ceñido bastante a la realidad y no han hecho sangre, cosa que no pasa en el libro que anteriormente se publicó al respecto.

EMILI CORTAVITARTE

En general te han parecido justas las críticas de la película por parte de los críticos de cine, pero también por parte de elementos ideológicos de las diversas izquierdas. ¿La gente ha entendido la dualidad que compone el personaje?

Bueno a mi sobre todo me han gustado mucho las declaraciones del actor que hace su papel, que creo que ha sido muy comprensivo con el personaje y la verdad es que ha recibido muchos premios por este personaje; él ha defendido esa dualidad que tiene la persona pero que a él, como actor de cine también le ha pasado en algunos momentos Creo que en general la crítica no ha sido muy muy dura y muy contundente, por lo cual yo consideraría que es bastante inexacta y que no tiene el suficiente rigor.

Hay un refrán que dice “Sin memoria no hay futuro”. Ha sido entonces quizás el silencio pactado al inicio de la transición española el principal responsable de la aparición hoy en día de esa generación de jóvenes que reivindican la dictadura? ¿Qué relación tiene la desmemoria con estos jóvenes que reivindican a Franco?

Yo creo que el pacto de la transición es clave Ese pacto por el cual todos aquellos que tenían crímenes de lesa humanidad han ido muriendo tranquilamente en sus camas y en sus casas, cosa que por suerte en otros países no ha sido así, y los responsables han sido juzgados. Y luego las leyes de Memoria han tenido buenas intenciones pero han sido claramente burladas por la derecha española en la medida en que han podido hacerlo, tanto desde los gobiernos centrales como desde los diferentes gobiernos autonómicos.

Se ha ido más allá de aquel pacto, Yo como docente recuerdo cantidad de compañeros y compañeras que me explicaban que no podían llegar a hacer la etapa franquista en segundo de bachillerato. Yo siempre les preguntaba cuánto tiempo se habían pasado con la Guerra de la Independencia o la guerra contra el francés a principios del Siglo XIX.

Eso no tiene ningún sentido; es decir, es importante que tratemos las etapas de más actualidad para formar a la juventud. Yo creo que es un poco un compendio de cosas. Ha habido una reticencia, sigue habiendo sectores de la judicatura que no tienen ninguna intención en remover esto, determinados partidos políticos, por supuesto; pero también creo que hay que hacer un llamamiento a la sociedad civil española para que se tome estas cosas mucho más en serio, porque si no nos pasa lo que nos está pasando ahora mismo.

¿Qué les dirías a los sectores del aparato político y portavoces de instituciones que han alargado hasta que se han muerto la mayor parte de testigos directos de todos hechos y que ahora se lamentan de ello?

Bueno, pues les diría que han cometido un craso error, que ocultar las realidades, que no pedir cuentas, que esconder determinadas situaciones no ha servido para nada de lo que supuestamente se pretendía; eso de no crear disensiones dentro de las familias, no alterar la situación o el orden institucional.

Eso no sirve para nada, porque el pueblo que no conoce su historia puede repetirla una y mil veces, y que evidentemente eso nos trae hasta aquí; estos barros son fruto de aquellos lodos. Toda esa flojera que ha habido a la hora de explicar lo que realmente pasó del 36 al 39 más los casi cuarenta años posteriores del franquismo nos llevan a las situaciones actuales, donde no hay una visión histórica cierta donde no hay una contabilización ni reivindicación de las víctimas.

Somos el estado del mundo que está detrás de Camboya en cuanto al número de personas que todavía están mal enterradas y que sus familias no han podido recuperar sus cuerpos. Y eso no tiene nada que ver con una transición democrática, sino todo lo contrario; crea un ejemplo diametralmente opuesto.

Más allá de Catalunya y Euskadi, que tienen contextos muy diferentes se ha recuperado y homenajeado más a los luchadores y luchadoras antifascistas y revolucionarios ibéricos en países receptores del exilio, como Argentina y Francia que en el resto del estado Español, ¿cómo ves tú esto?

Yo agregaría un tercer territorio que es Andalucía, quizás porque conozco el gran trabajo de los compañeros y compañeras que tienen todos los nombres y han elaborado un listado de más de 50 mil personas que lucharon en la Guerra Civil Española y posteriormente desde el exilio contra la invasión nazi y que algunos de ellos acabaron en campos de concentración.

Pero es verdad que en muchos momentos uno se encuentra ante situaciones como esta. Un ejemplo es este: acabamos de publicar en la fundación unas memorias sobre Juan Peiró, un destacado anarco-sindicalista que fue Ministro de Energía durante la Segunda República y que fue detenido en Francia y trasladado por la Gestapo a España y allí fusilado. Su hijo, que ha escrito esta magna obra, es una persona que tiene una medalla de honor Polonia y otra de Francia por su trabajo en la resistencia.

Yo creo que no se ha traducido de esa manera en España. No se venció la dictadura, el dictador murió en su cama y las consecuencias son estas. La dictadura no solamente la hacía el dictador, había componente social muy importante y esas gentes han seguido ocupando cargos y no han permitido que todo el trabajo de recuperación se hiciera.

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