“Hay gente a la que le cuesta reconocer que Nicolás Maduro es un gran gobernante”

Por Walter C. Medina

ENTREVISTA A ADRIANA CASTAÑO

“Cenizas de Babilonia. Diáspora Española” tuvo como invitada a Adriana Castaño, abogada internacionalista, feminista, anti-imperialista y, según sostiene, “profundamente chavista y ciudadana de la Patria Grande”.

La entrevista giró en torno a la realidad que vive por estas horas Venezuela bajo la amenaza de Donald Trump y el constante asedio de la derecha internacional. De la extensa charla con Francisco López para AM830 Radio del Pueblo se ofrece a continuación un breve resumen.

Tú naciste en Colombia, pero resides en Venezuela. ¿Cómo es que siendo que supuestamente la gente quiere irse de Venezuela, tú te fuiste a vivir a ese país?

Eso es bien particular; uno cuando hace los procesos de migración hayo muchas razones. Yo digo que hay razones económicas, pero también uno persigue sueños que no son solamente de carácter económico sino también emocionales, deseos de cambiar, y yo vine por dos razones, una porque quería vivir el proceso de socialismo del Comandante Chávez. Colombia vivía un momento muy difícil, y yo me dije “Dios, me merezco vivir y conocer ese momento de alegría, de profunda efervescencia de los movimientos e transformación del Estado, de la Revolución”, y me vive para acá. Y posteriormente porque perseguí los sueños del amor, aquí nació mi hijo; entonces fueron varias cosas que se conjugaron.

Y en la actualidad, yo siempre digo que uno no abandona el barco cuando está mal”. Vivimos procesos muy gratificantes en Venezuela y muchas personas de muchas nacionalidades nos hemos quedado aquí en los momentos complicados que desde el 2014 hemos venido viviendo.

Deberíamos vivir de cierto heroísmo cotidiano, porque hacer la res prospectiva y míranos desde el 2014 hasta ahora, hemos tenido muchísima fortaleza, creatividad, una manera de rehacernos justos y mirar la agresión multiforme de la que hemos sido parte y son embargo todavía conservemos ilusiones, la vida comunal, la idea de pensar que nuestro máximo logro son la paz, la unidad, la colectividad.

Hay gente a la que le cuesta reconocer que Nicolás Maduro es un gran gobernante que ha seguido un legado chavista en materia de mantener la paz, de enfrentar al imperio más violento, grande y decadente del SigloXXI; no hemos pasado por una hambruna y eso ha sido por la fortaleza del poder popular.

Han sido muchos desafíos los que hemos superado y la reacción de los Estados Unidos violenta contra nosotros ha generado muchísima fuerza y muchos deseos de superar ese rentismo petrolero para poder ser una economía productiva como lo ha establecido el plan de la patria desde 2019.

Hay que recordar que Venezuela sufre un boicot comercial por parte de los Estados Unidos que le ha afectado muchísimo; tanto que el pueblo venezolano tuvo que reinventarse incluso en su dieta. Un ejemplo de esto es el descubrimiento de las lentejas.

No sabíamos que era un alimento tan versátil, que se podían hacer tantas cosas con ellas. Las amigas compartíamos las recetas. Hubo un momento en el que la gente decía “no quiero más lentejas”, porque las veíamos en todas partes. Es un gran producto, yo creo que la proteína fue maravillosa y la reinventaos en las tortas.

Fue de todas las maneras de prepararlas: En tortas, minestrón, sopas, licuados. Lo que no logramos con el boicot a Coca Cola, con la crisis del azúcar de fue Coca Cola y nos tocó volver a los jugos naturales, al jugo de guayaba, cosas que se producían aquí, porque la gente en la manera de contrarrestar fu volver a recordar la soberanía alimentaria que uno ve perdiendo con la economía de puerto, porque se traen muchísimas cosas importadas y se hace dependencia de lo dulce y los refrescos en todas sus manifestaciones.

Hay distintos ingenieros agrónomos que están llegando a Venezuela desde otros países y que están ayudando a esa transformación; para dejar de tener dependencia con respecto al exterior y a los Estados Unidos. Cuéntanos de esto.

Nosotros propusimos muchísimas cosas durante la pandemia. Yo trabajaba en la Fundación Árbol con los ingenieros agroforestales con los que aprendimos a cuidar las cuencas, pero también a hacer compost para la idea de agricultura urbana y peri-urbana; hubo un momento en donde todos teníamos algo sembrado en casa; fuimos produciendo semilla del pimentón, del cebollín, de los ají picantes, los ají dulces, y después con las comunas que producían su propio alimento, y los comités de abastecimiento local.

Venezuela está siendo acosada por las amenazas de Donald Trump de invadir el país. La gente no entiende por qué el pueblo venezolano es feliz y no le teme a los Estados Unidos Es la historia de que siempre se recuerda que hay un antecedente heroico y de batalla real; en este territorio se derrotó al imperio más grande del SigloXVI. Se derrotó al imperio español.

Y ese imperio era el más poderoso de su época. Y aquí han nacido héroes de la talla de Simón Bolívar, pero también de Urdaneta; posteriormente Ezequiel Zamora. Esto es un sentimiento muy importante, es una idea de naciones integradas, no solo militar de independencia, sino de un programa nacional y popular que estuvo aplazado durante muchos años en relación con el Comandante Hugo Chávez.

Yo pienso que el Comandante hizo su labor pedagógica y todas las fuerzas populares organizadas hemos entendido el papel histórico que debemos seguir cumpliendo. Por eso es muy importante comprender la agresión directa que estamos sufriendo por parte de los Estados Unidos, amenazando directamente a un presidente, violando cualquier tipo de normativa internacional; debe sacarse la máscara y decir que lo que más le importa aquí es el petróleo y tener un gobierno títere, como lo anunció el Comandante desde hace mucho tiempo, desde que inició la ruptura con los Estados Unidos, en la primera década de este siglo.

Hay una confianza fuerte en que los gobernantes tienen un compromiso moral y ético en que tiene que proteger este pueblo, nuestro bienestar colectivo, y hacer que el Estado haya cumplido la idea de transferir poder al pueblo, que confíe en la organización popular, que no haya dudas de que escuchando lo que se requiere, es la manera de gobernar.

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