La integrante del GT de IGUALDAD del Círculo de Podemos Argentina-Provincias y columnista en Cenizas de Babilonia-Diáspora Española (AM570 Radio Argentina) Adriana Fonseca, española y argentina, residente en la provincia de Tucumán (Argentina) analizó la Ley de Garantía Integral de Libertad Sexual y explicó las razones por las que la derecha se opone al amparo y protección que esta norma brinda a las mujeres.
“Irene Montero, respondiendo de algún modo al caos que se generó por las reducciones de condenas a partir de la aprobación de la ley Sólo Sí es Sí, accedió a revisar el punto de las condenas en específico y expresó que es el único punto que se va a tocar porque la ley está bien hecha. Y es verdad. Me leí la ley en el BOE y es una ley bastante completa. Pero vamos a analizar por qué la derecha siempre está poniendo los palos en la rueda con respecto a derechos de las mujeres”, sostuvo Fonseca en el primer tramo de su exposición.
“Sabemos que la ley surge a partir del caso conocido como La Manada, que es un hecho aberrante de una violación grupal a una chica en las fiestas de San Fermín en 2016. Lo más importante de la ley es la existencia del consentimiento para cualquier acto sexual. También lo que logra esta ley es que ya no exista la división entre abuso y agresión sexual, sino que todos los actos sean considerados como agresiones sexuales, todos los actos que no hayan tenido consentimiento, por supuesto. Lo que la ley también tiene es buscar las medidas de protección a las víctimas, que van a tener recursos a su disposición aunque no presenten la denuncia. Y esto es muy importante porque se busca que la mujer no sea de nuevo victimizada. Una mujer que sufre una agresión sexual es una víctima que era constantemente victimizada porque no existía ninguna ley que la contenga, porque no existía un protocolo que considere que no hay volver a victimizar a esa persona, no hacerle vivir a través de lo que tenía que contar, otra vez ese suceso tan desagradable”.
“Se establecen medidas de protección especial para los niños y las niñas. El acoso callejero también está dentro de esta ley, porque es un hecho que debe castigarse. Se incorporan las medidas para luchar contra la prostitución; se incluyen en la ley todas las violencias ejercidas hacia las mujeres, contra las mujeres por el simple hecho de ser mujeres, y se pone énfasis en la educación. Y este es un punto de la ley que a mí me encanta, porque busca constantemente realizar la prevención a través de la concienciación y de la educación, a diferentes niveles de empresas privadas y públicas, a diferentes niveles de administraciones, de edades”
Continúa Adriana Fonseca:
“Hay que concienciar a la gente sobre lo que es una agresión sexual; poder identificar cuándo alguien está cometiendo una agresión sexual; poder enseñar a los niños que no es bueno poder acceder a pornografía, que eso también constituye una violencia sexual; poder controlar los contenidos de publicidad que incluyan violencia sexual como un modo de promocionarse. Es interesante porque toma el concepto de que la violencia sexual es una construcción social, y como tal, tiene que ser deconstruida a partir de la educación”
Hasta hace no muchos años atrás, las mujeres eran una mano de obra barata, de hecho no cobraban nada; las mujeres maternaban, limpiaban, cuidaban, sin ninguna paga.
“Pero vamos a ver por qué la derecha siempre pone los palos en la rueda, por qué busca que estas leyes, que nos benefician a las mujeres, que nos protegen, no sigan adelante, no se apliquen. ¿Por qué busca la derecha volver a la ley anterior? Porque el feminismo, y ésta es una ley feminista, plantea un modelo de sociedad anti-neoliberal, incompatible con un proyecto de derechas. Esto es lo que dice Beatriz Gimeno. Porque la desigualdad es un arma muy potente para la derecha, es un arma de dominio para los grupos más vulnerables. Porque la desigualdad es la madre de todas las desigualdades; de las de raza, de etnia, económica. Porque las desigualdades se retroalimentan entre sí. La extrema derecha tiene como objetivo revertir cualquier política social demócrata, privatizar todo y aumentar las tasas de ganancias del capital. Hasta hace no muchos años atrás, las mujeres eran una mano de obra barata, de hecho no cobraban nada; las mujeres criaban, limpiaban, cuidaban, sin ninguna paga. Y la lucha de las mujeres pone en cuestión el orden patriarcal, y esto cuestiona el orden neoliberal, porque lo que busca la derecha es mantener el modelo hegemónico en donde las mujeres no tienen cabida. Por eso las ideas de familias tradicionales se refuerzan, por eso los provida, porque básicamente el movimiento feminista lo que busca es que todos seamos tratados como iguales«.
«Quizás deberíamos hablar de equidades ante la ley, pero es importante reconocer que lo que se busca es la buena convivencia y el reconocimiento del otro, que no es igual a uno y que no tiene por qué serlo; y está bien reconocer las diferencias. Es por esto, que hoy más que nunca es conveniente que apoyemos la aplicación y la evolución de esta ley de manera conveniente, porque no podemos dejar que sigan avanzando en contra de nuestros derechos, sobre todo la derecha”.
Transcripción hecha por Walter C. Medina, de la redacción de la Revista TU VOZ en Argentina.