Por Walter C. Medina
ENTREVISTA A MAX CABRERA desde Guatemala
Max Cabrera, analista internacional que ha participado como veedor en diversas elecciones en Latinoamérica, dialogó con Francisco López durante el bloque “La Entrevista” del programa radial “Cenizas de Babilonia. Diáspora Española” que emite AM830 Radio del Pueblo.
Desde Guatemala, Cabrera analizó la situación política que vive ese país desde la asunción de Bernardo Arévalo y sostuvo que “Si Arévalo logra vencer la gran batalla el año entrante, si consigue hacer unas buenas alianzas, si logra vencer a ese sistema de justicia que lo tiene atrapado, yo creo que estaría siendo uno de los mejores presidentes de Guatemala”
¿Qué balance haces de la presidencia de Bernardo Arévalo en Guatemala?
Bernardo Arévalo asumió la presidencia hace apenas dos años; la mayoría de guatemaltecos buscaba un líder que pudiera sacar a nuestro país del fango de la corrupción y de las estructuras criminales que tienen bajo control particularmente al sector de la justicia. Pero también la gente tenía la idea de que se pudiera articular una ruta para el desarrollo y la solución de problemas básicos en beneficio del colectivo.
La gente lo vio con mucha esperanza, pero se consideró un triunfo popular sobre los poderes fácticos en este país, que han mantenido el control del poder del Estado, y que se han servido de ese poder exclusivamente para sus intereses.
En las estadísticas internacionales, Guatemala es uno de los países más atrasados en América Latina, pero sin embargo la gente tenía la esperanza de hacer a un lado doce años de gobiernos corruptos; desde el gobierno de Otto Pérez Molina que ahora guarda prisión por corrupción, el gobierno del payaso de Jimmy Morales, y el corrupto de Alejandro Giamattei; doce años de robos descarados, entonces la gente estaba motivada a hacer a un lado a todos estos sectores fácticos y salió a darle su apoyo a Arévalo que es un hombre honesto que hasta el día de hoy ha mostrado una transparencia en el manejo de la cosa pública, y eso ya es ganancia.
Tiene que gobernar en un Estado que está cooptado en todas sus instituciones por grupos verdaderamente criminales. Es tanto el poder que han logrado estos grupos y estas alianzas criminales, que lograron prácticamente eliminar su partido; Arévalo se quedó sin partido, le eliminaron la ficha del partido, lo sacaon del Tribunal Supremo Electoral.
En este mismo sentido, Cabrera señaló que “Hay una situación bien complicada, sobre todo porque el gobierno actual necesita entrar en una batalla a la que nosotros llamamos La Madre de todas las Batallas.
En medio de este problema que él tiene, porque lo tienen prácticamente encerrado, y la ciudadanía no ve esperanzas de que un gobierno progresista como el de Arévalo le pueda solucionar sus problemas. Se encuentra ante una situación muy complicada: El año entrante viene la elección de todas las cortes en este país.
Y esa en la batalla más grande y ahí vamos a ver de qué está hecho el gobierno de Arévalo. Otra de las batallas es el alto nivel de violencia. Aquí la gente lo que dice es que Arévalo no tiene la capacidad de parar la violencia. Esta estructura criminal tiene el control de las maras, de las pandillas, de las cárceles; y desde ahí extorsionan, ordenan crímenes. Y esa violencia es producto de esa estrategia política de debilitar al gobierno de Arévalo.

¿Por qué crees que el progresismo no termina de hacer los deberes?
Este fenómeno es producto de una estrategia de la derecha en América Latina. La derecha latinoamericana está muy bien estructurada, y en este momento les interesa de alguna manera debilitar a los gobiernos progresistas.
En el caso de Guatemala, Arévalo no era el presidente que ellos querían; se les coló. No se dieron cuenta en qué momento sus candidatos de derecha iban camino a la derrota. Arévalo fue una sorpresa. Otro de los problemas de los gobiernos progresistas es la comunicación; hay que aprender de López Obrador, y ahora de Claudia Sheinbaum, de cómo manejan la comunicación para contrarrestar cualquier manipulación que pudiera venir de la derecha latinoamericana porque ellos sí están bien cohesionados para debilitar a los gobiernos democráticos y progresistas de América Latina.
Así mismo, Cabrera sostuvo que “nosotros tenemos una responsabilidad como izquierda. Por qué no ejercemos como una verdadera oposición ante un gobierno de derecha. En el caso de la comunicación, lo que Arévalo comunica, o las conferencia de prensa no llegan a la población. A la gente le cuesta entender. Y hay que recordar que Arévalo es un académico, un intelectual, un hombre experto en relaciones internacionales.
Guatemala se generó muchas expectativas, pero no la estamos pasando bien. Tenemos una responsabilidad como izquierda. Por qué no ejercemos como una verdadera oposición ante un gobierno de derecha, tenemos una responsabilidad como izquierda. Arévalo es un tipo hábil.
Y si logra vencer la gran batalla el año entrante, si consigue hacer unas buenas alianzas, si logra vencer a ese sistema de justicia que lo tiene cooptado, yo creo que estaría siendo uno de los mejores presidentes de Guatemala.