Por aquí, todo son buenas noticias.

¡Osiyo! “Hola” en cheroqui.

En la tierra que varios pueblos nativos conocen como la “Isla de la Tortuga” las aguas políticas que la rodean están mucho más calmadas desde las elecciones de medio ciclo de hace 4 semanas. Elecciones que, por otro lado, no han terminado aún, porque hoy tiene lugar la votación para decidir el último escaño del Senado que queda por asignar, en el estado de Georgia, que tuvo que ir a segunda vuelta porque ningún candidato llegó al 50% de los votos. Probablemente gane el candidato Demócrata, lo que aumentará la mayoría de su partido en el Senado. Pero si ganara el Republicano, no afectaría mucho el equilibrio de poder, así que esta elección no está acaparando mucha atención.

¿Qué otras cosillas están dando que hablar a la gente en Estados Unidos? Os paso unas cuantas y os advierto que, en un intento de ser más positiva en este mundo tan deprimente, voy a contaros solo cosas buenas:

Una excelente noticia es que el Senado aprobó el llamado Respect for Marriage Act, la Ley del Respeto al Matrimonio, con la que se blinda a nivel federal el derecho de cualquier persona adulta a casarse con quien quiera, independientemente de su género o de su, atención, ¡raza! Pues sí. Por increíble que pueda parecer a estas alturas del siglo XXI, esta ley era necesaria porque, después de la derogación del derecho al aborto, uno de los jueces de la Corte Suprema sugirió que la ley de 2015 que protege el matrimonio entre personas del mismo sexo debería ser sometida un proceso de revisión similar. Y en seguida surgieron voces expertas avisando de que, aplicando la misma lógica, el objetivo siguiente podía ser la ley de 1967 que protege el matrimonio entre personas de distintas razas. En fin, que la actual Corte Suprema puede dedicarse a quitar derechos a la gente a diestro y siniestro. De todas formas esta nueva Ley del Respeto al Matrimonio tiene un alcance limitado porque, por la estructura política de los Estados Unidos, no puede impedir que en el futuro un estado anule el derecho de personas LGBTQ+ a casarse. Lo que sí hace la ley es obligar a todos los estados a reconocer los matrimonios válidos en los demás. Así que, si Mississippi prohíbe el matrimonio entre dos mujeres, se pueden ir a California a casarse y su estado tiene que reconocer el matrimonio. Evidentemente, como siempre, si algún estado decide tomar estas medidas regresivas, quienes más perjudicadas saldrán serán las personas con menos recursos que no puedan permitirse un viaje así. 

Otra noticia excelente, aunque solo para accionistas y altos mandos de las empresas ferroviarias, así como otras personas sin empatía, es que el Congreso ha aprobado una nueva legislación que obliga a les trabajadores del sector a aceptar un acuerdo que, entre otras cosas, les niega el derecho a días de baja por enfermedad. Para que se entiendan mejor las circunstancias, aclaro que en el país de las oportunidades no hay legislación federal que garantice un número x de días de baja remunerada al año, y se estima que unos 33 millones de personas trabajadoras no tienen ni siquiera uno, con lo cual muchas viven a un pelo de la precariedad. Entre estas personas están les empleades en el sector del ferrocarril, a pesar de los riesgos de sus ocupaciones. 

Pues bien, los sindicatos del sector quisieron negociar un acuerdo con su patronal, pidiendo mejoras laborales y días de baja por enfermedad, o amenazando con una huelga en diciembre. Sin embargo, las empresas ferroviarias, que están obteniendo beneficios récord, no querían darles ni eso y han aprovechado la coyuntura temporal, económica y política para proteger el capital y explotar a las personas. ¿Cómo? De esta manera: 

La huelga, justo a las puertas de la temporada de navidad y en un momento inflacionario, habría interrumpido la cadena de suministros y el transporte de pasajeros con un impacto estimado de 2.000 millones de dólares por día. Joe Biden, que durante su campaña se prometía como el presidente más a favor de los derechos laborales de la historia, intentó facilitar un acuerdo. Los sindicatos rebajaron sus demandas de 15 a 4 días anuales. Pero las empresas se negaron en redondo a negociar, a sabiendas de que a Biden no le convendría ser el responsable último de lo que él mismo ha llamado una “catástrofe de navidad” y que forzaría al Congreso a tomar medidas. Como efectivamente ha ocurrido. (En contraste, y para que podáis apreciar mejor los niveles de igualdad de oportunidades de este país, os cuento que las personas que han votado esto en el Congreso TODAS tienen derecho a un número ilimitado de bajas.) 

Carteles sindicales: Todos los gremios – Todos los votos.

Otra buenísima noticia para quienes se aferran a su supuesto derecho constitucional a poseer un arsenal de armas es que nadie se lo va a quitar este año, ni los dos próximos, a pesar de los 618 tiroteos que llevamos en 2022, con 646 personas muertas y 2.588 heridas. 

Y quienes sientan resentimiento por los resultados de la II Guerra Mundial pueden consolarse con el aumento de las expresiones de odio y los ataques a personas e instituciones judías, gracias en gran medida a Trump y Kanye West. Aunque a este último (ahora conocido como Ye) Elon Musk le ha bloqueado la cuenta de Twitter por haberse pasado de antisemita al publicar una esvástica. En cualquier caso, aunque no hay datos concretos, parece ser que en muchas familias judías están, ojipláticas, volviendo a considerar una pregunta recurrente en su historia: ¿Es hora de emigrar de este país?

Si hablan francés, estas familias pueden considerar Francia, que allá por 1778 se convirtió en el primer aliado internacional de los Estados Unidos. Su presidente, Emmanuel Macron, ha visitado a Biden, para revitalizar los lazos de amistad, con la idea expresa de hacer frente al autoritarismo en aumento en el planeta. No ha trascendido si han hablado de la Copa del Mundo, porque, como ya indicó el galo, no se debe mezclar la política con el deporte. Por lo menos abiertamente.

Silabario cheroqui. Foto de Kaldari



Hablando de presidentes, no puedo terminar sin mencionar algo más sobre el inmencionable. Trump ha dicho en su Truth Social (la plataforma que usa desde que le cerraron la cuenta de Twitter) que hay que declarar la nulidad de las elecciones de 2020, devolverle a él la presidencia y abolir la constitución. Esto hay que interpretarlo como síntoma de su desesperación, porque todas las causas abiertas contra él progresan lenta pero adecuadamente. Y, hace poco, dos cabecillas del grupo de extrema derecha Oath Keepers han sido declarados culpables de conspiración a la sedición, por su implicación en el asalto al Capitolio para impedir la transición pacífica del poder tras las elecciones. Lo peor de esta gran noticia es que Trump es, por el momento, el único candidato a la presidencia por el partido Republicano y esto es lo que propone.

Bueno, ya solo me queda desear que en vuestros países haya tantas buenas noticias como aquí, y que tengáis un buen día. O, como decimos en cheroqui, ¡Osda iga heda!

Por Celeste Delgado Librero, Redacción Revista TU VOZ. Delegación de EEUU-CANADÁ

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