Por Ángel Maciá, Doctorando en Sociedad, Desarrollo y Relaciones LaboralesEscuela Internacional de Doctorado. Universidad de MurciaCruz de la Orden al Mérito Civil, Vietnam, Revista TU VOZ
El presidente de Vietnam, Vo Van Thuong, será reemplazado, por lo que la tarea principal de los líderes del país ahora es encontrar su sustituto y estabilizar la situación.
El Comité Central del Partido Comunista de Vietnam (PCV) anunció hoy haber aceptado la renuncia del presidente Vo Van Thuong a todos los cargos oficiales y del Partido. Mañana, la Asamblea Nacional de Vietnam convocará una sesión extraordinaria para votar oficialmente su renuncia, apenas un año después de haber alcanzado la presidencia. Thuong estaría involucrado en un escándalo de soborno relacionado con un promotor inmobiliario local, procesado por diferentes cargos de corrupción.
Diversas fuentes indican que, durante su mandato como secretario del Partido en la provincia de Quang Ngai (2011-14), uno de los familiares de Thuong recibió 60 000 millones de VND (2,4 millones de dólares estadounidenses al tipo de cambio actual) de dicho promotor, supuestamente para que Thuong construyera su santuario dedicado a sus ancestros, si bien detrás de todo lo que podría existir es una responsabilidad “in vigilando” al no actuar contra otros funcionarios a su cargo durante el citado mandato y que han sido expedientados, encontrándose algunos de ellos a la espera de su procesamiento definitivo.
La dimisión de Thuong marca el comienzo de una nueva fase de incertidumbre política en Vietnam. Desde el XIII Congreso Nacional del PCV a principios de 2021, se han producido numerosas expulsiones y procesamientos de miembros del Partido con alto perfil, incluidos cuatro miembros del Politburó (incluidos Thuong y su predecesor Nguyen Xuan Phuc), un viceprimer ministro, dos ministros y más de una docena de líderes provinciales.
El rápido reemplazo de presidentes es particularmente digno de mención, ya que Phuc también fue destituido de su cargo después de menos de dos años de mandato a principios de 2023.Al igual que la de Phuc, la salida de Thuong no dará lugar a cambios políticos significativos, al menos de momento.
Para empeorar las cosas, la mala salud del secretario general Nguyen Phu Trong y la incertidumbre en torno a su sucesión es más que probable que provoque un aumento de las luchas políticas internas de cara al próximo Congreso Nacional del PCV, que tendrá lugar a principios de 2026, lo cual a su vez podría generar aún más preocupaciones.
Las implicaciones de la caída de Thuong para el futuro político de Vietnam, particularmente en la carrera por el reemplazo del Secretario General Nguyen Phu Trong, dependen de quién ocupará el puesto de Thuong. Según los reglamentos del Partido, el nuevo presidente debe haber cumplido un mandato completo como miembro del Politburó, lo que significa que entre los posibles contendientes se encuentran ahora Trong, el primer ministro Pham Minh Chinh, el presidente de la Asamblea Nacional, Vuong Dinh Hue, y la miembro permanente del Secretariado del PCV, Truong. Thi Mai y el ministro de Seguridad Pública, To Lam.
Trong, que ocupó el cargo de presidente de 2018 a 2021, podría hacerse con el puesto de nuevo, pero sus problemas de salud podrían ser un impedimento importante. Es poco probable que Chinh y Hue estén interesados, ya que sus lugares actuales tienen más poder que la propia presidencia. Esto deja a To Lam y Mai como las opciones más probables.
A sus 66 años, Lam podría tener interés en el puesto, ya que podría permitirle buscar una excepción a la regla del límite de edad del Partido y postularse para el puesto más alto en 2026. Sin embargo, no está claro ya que su posición actual como ministro de Seguridad Pública es extremadamente poderosa, particularmente en el contexto de la actual campaña anticorrupción en la que se encuentra embarcado el PCV. Por el contrario, el papel del presidente implica principalmente deberes ceremoniales.
Por otro lado, Mai también es una candidata viable para el puesto, especialmente a los ojos de quienes compiten por el puesto de secretario general, debido a no cuenta con demasiados apoyos, lo que significa que es poco probable que pueda aprovechar la presidencia como medio para competir por el puesto más alto del Partido en 2026.
Otra opción sería que el Partido cambiara sus propias reglas y nominara a un político diferente que aún no haya completado un mandato completo como miembro del Politburó, pero que potencialmente podría traer estabilidad al sistema.
En este escenario, la lista de candidatos podría estar integrada por el secretario del Partido de Ciudad Ho Chi Minh, Nguyen Van Nen, o el ministro de Defensa, Phan Van Giang. Sin embargo, es posible que los actuales candidatos potenciales para reemplazar a Trong y sus respectivos bandos no apoyen esta decisión, ya que no quieren ver el surgimiento de un contendiente nuevo y viable que podría potencialmente obstaculizar sus propias aspiraciones al puesto más alto del Partido en 2026.
Debido al complejo proceso de selección y al limitado plazo, es muy probable que el Partido aún no haya llegado a una decisión unánime sobre el sucesor de Thuong. Si este es el caso, la vicepresidenta Vo Thi Anh Xuan asumirá el papel de presidenta interina hasta que el Partido pueda tomar una decisión final.
En este contexto, se espera que continúen las incertidumbres políticas en el país y las relaciones exteriores del país también podrían verse afectadas, con posibles retrasos o cancelaciones de intercambios bilaterales de alto nivel.
Por ejemplo, debido a la destitución pendiente de Thuong, la visita a Vietnam del rey Willem-Alexander y la reina Máxima de los Países Bajos, que estaba prevista del 19 al 22 de marzo, se pospuso a petición de Vietnam. Incluso después de que se elija al nuevo presidente, las luchas políticas internas probablemente persistirán hasta 2026, a menos que se anuncie un plan de sucesión claro para Trong. Mientras tanto, los inversores y los socios de Vietnam tendrán que vivir con las nuevas realidades políticas del país.