En Brasil, donde se está realizando la COP30, en donde se debate sobre el medio ambiente y las estrategias en todo el mundo. para reafirmar el compromiso climático global.
Son las primeras horas, los primeros acercamientos en esta cumbre, que tiene como anfitrión el presidente brasileño, Luis Inacio Lula da Silva y cerca de 50 jefes de Estado y de Gobierno se reunieron este jueves 6 en esta ciudad amazónica para debatir cuáles son las acciones más urgentes para frenar el calentamiento global, la contaminación y como consecuencia el cambio climático y además debatir sobre las energías renovables siempre en la agenda verde, estos temas que son los principales a debatir y cada uno trae diferentes propuestas, lo que hacen los funcionarios es asumir responsabilidades, no compromisos para tratar de ponerlos a prueba en sus países y cumplir con determinados objetivos medioambientales.
Aunque ausente, Estados Unidos sigue siendo el protagonista en esta cumbre climática. Es que es la primera vez en 30 COP que Estados Unidos no envía una delegación de alto nivel en contraste con los 250 delegados que enviaron el año pasado a la COP 29 en Bakú.
El presidente Donald Trump tampoco vino al encuentro. En la Comunidad Europea, los líderes reunidos hicieron un llamado a la cooperación y al multilateralismo.

El presidente Donald Trump dijo también que esto es una estafa directamente, como para hablar un poco de qué está opinando cada una de las potencias en relación al cambio climático, es una postura que resalta la distancia de Estados Unidos con la agenda ambiental internacional. Donald Trump lo dijo en infinidad de oportunidades que para el cambio climático no existe.
Y quien quizás mejor lo supo aprovechar fue China. El enviado especial a Belém dijo «la gobernanza global sobre el clima está entrando en una etapa crítica», por lo que dijo que «se debían dejar abiertas las en el camino correcto, que es el de la transición energética».
Este es un tema clave, porque bajo el gobierno de Donald Trump se han congelado la mayoría de subsidios nacionales e internacionales a energías renovables, en contraste con China, que produce un tercio de las energías limpias del planeta.
Y los latinos también se refirieron a la ausencia de Estados Unidos en los diálogos. el anfitrion Luis Inacio Lula da Silva señaló que «se necesitaba de la extensión de las fuerzas extremas, que promueven las Fake News, las falsas noticias», ante esas falsas noticias, el chileno Gabriel Borich, señaló que «se necesita gobernanza y poder político para hacerle frente a esas mentiras y el negacionismo del cambio climático».
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, sí dijo sobre el nombre propio de Donald Trump, alegando que «Trump está mintiendo y lo que hay que hacer es dejarlo solo y olvidarlo». Aunque olvidar a Estados Unidos en cuestiones de clima es difícil, pues una vez entre en vigor su retiro del acuerdo de París, todo el planeta podría aumentar su temperatura 0,1 grados Celsius, según el programa de medio ambiente de la ONU, esto ante las inacciones de Estados Unidos.

Tenemos que hablar también para aclarar cómo no, de Brasil que tiene ese papel fundamental por ser el anfitrion, ¿cuáles son esas ideas que está impulsando y qué recibimiento han tenido hasta ahora? sobre el recibimiento, todavía falta tiempo, pues apenas es el primero de los dos días de la cumbre de líderes y la COP oficialmente comenzará el 10 de noviembre, sin embargo, hasta ahora las promesas se han quedado más en palabras que en acciones, por ejemplo una de las banderas centrales de Luis Inacio Lulada Silva es el lanzamiento del fondo de bosques tropicales para siempre, que aspira a conservar las selvas tropicales del planeta.
Al respecto, el príncipe William señaló en Belém que respaldan esta iniciativa, sin embargo, el gobierno británico, liderado por Kirstarmer, señaló justo antes de la COP que por ahora no van a invertir en el fondo, a pesar de que sí se esperaba de esta manera, «las finanzas británicas estarán priorizadas al crecimiento interno y el mejoramiento de la vida local» , según dijo el propio primer ministro, incluso en Belém.
Kirstarmer ni siquiera mencionó el fondo de bosques tropicales para siempre en su alocución, mientras que el propio ministro de hacienda de Brasil está bajando las expectativas, al inicio se esperaba que el fondo comenzara con un monto inicial de 25.000 millones de dólares, ahora el funcionario dice que se necesitan al menos 10.000 millones.
Otra de las banderas de Lula es la lucha contra la pobreza y el hambre y que viene de tiempo atrás esa lucha, pues en el G20 que acogió Brasil el año pasado, Lula logró que se creara una alianza global para combatir estos dos fenómenos, y en Belém, espera que se firme una declaración para ligar la pobreza y el hambre, con la lucha climática, partiendo de la desigualdad de que en los países más pobres es donde quizás se ven más los impactos de los climas extremos, pero por ahora esa declaración de Belém sobre la lucha contra el hambre y la pobreza esta en el aire.


